Lo que más me genera curiosidad de tu especie, animal pelotudo, no es ver la cantidad de maneras que tenés de incomodar a las mujeres, sino que vos mismo te expones como un ser cagón: les gritas guarangadas a las mujeres y corres, les gritas desde un auto y no paras, chiflas y te escondes.
Realmente pongo en duda si alguna vez tuviste la capacidad de entablar conversación con una mujer y atraerla con tu contenido intelectual, con tu buen humor.
Seguí tocando bocina así puedo mirar aunque sea por un instante la clase de persona que me repugna, que no tocaría ni por lástima.
Mientras sigan existiendo pelotudos como vos (y hablo a uno solo para no generalizar, aunque sepamos que son la mayoría) van a seguir saliendo a la calle mujeres enojadas, impacientes, inseguras, temerosas y a la defensiva.
Nadie te preguntó si somos lindas. Nadie te preguntó lo que nos podes hacer. Tu piropo es violencia.
13 de enero de 2016, extraído de mi Facebook personal.
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